menu para cuidar tu salud digestiva e intestinal

Menú para cuidar tu salud digestiva e intestinal

Una vez pasado fiestas toca cuidarnos y recuperar el ritmo de vida anterior. Es probable que hayamos hecho excesos de comida y poca actividad física.  Es normal que este cambio de hábitos a muchos les repercuta a nivel intestinal. Alteraciones digestivas como hinchazón, estreñimiento o flatulencia son muy comunes después de grandes comidas.

La dieta constituye uno de los aspectos básicos en la prevención de enfermedades digestivas. Seguir una alimentación saludable enfocada a fortalecer la salud intestinal será clave para encontrarte mejor. Si sufres de estreñimiento ocasional o de molestias digestivas, sigue leyendo, porque este artículo te será de gran ayuda.

Aumentar el consumo de productos fermentados y vegetales cocinados es la receta perfecta para mejorar tu tránsito intestinal. En este artículo especificamos menús saludables enfocados a una mejora digestiva. De esta manera se podrán incorporar todos los alimentos con beneficios digestivos, combinados de la manera más práctica. De todo ello ya te hablamos en el artículo sobre alimentos para cuidar la digestión. ¡Ahora toca ponerlo en práctica!

Menú rico en fibra

La fibra es un componente importante de la dieta y debe consumirse en cantidades adecuadas. De acuerdo con los expertos, la cantidad de fibra que consumimos en España es menor de lo recomendable para nuestro organismo. Hay una relación directa entre el consumo de una dieta rica en fibra y los beneficios en la salud digestiva. Aumentar el consumo de fibra de la dieta nos beneficiará mejorando el tránsito intestinal. Además, reducirá los problemas asociados a la falta de regularidad como la sensación de hinchazón, dolor abdominal, pesadez, etc.

Desayuno

Es un buen momento para hacer un aporte de fibra importante como cereales integrales o de grano entero o pan integral. También añadiremos proteínas como el huevo, jamón, queso bajo en grasa o yogur, que además es una buena fuente de probióticos. Y completaremos la comida con líquidos abundantes, leche, agua, infusiones o un zumo natural sin colar.

Comida

Como primer plato es recomendable cremas, hervidos, guisados o potajes de legumbres sin carnes grasas. Las legumbres son ricas en fibra y, si están trituradas, son de más fácil digestión. De esta manera nos evitamos las flatulencias que pueden venir asociadas cuando no solemos comer legumbres y empezamos a incluirlas en nuestra alimentación.

Cena

Es importante cenar temprano y ligero para facilitaremos el tránsito intestinal que por la noche es más lento.

Este sería un ejemplo de menú de un día:

  • Desayuno: copos de trigo integrales enriquecidos con salvado de trigo, leche, pera.
  • Media mañana: bol de frutas con kéfir.
  • Comida: puré de lentejas rojas con zanahoria, pollo al horno con tomate aliñado y cous-cous, yogur.
  • Merienda: queso con membrillo o cuajada.
  • Cena: judías verdes con patata, zanahoria y kimchi (col fermentada), emperador a la plancha con espárragos, manzana al horno.

Consejos prácticos para un menú rico en fibra

  • Aumentar gradualmente la fibra, ha­cerlo de manera gradual para evitar malestar abdominal y flatulencias.
  • Acompañar la ingesta de fibra con agua. Una manera de mantenerse hidratado es con las infusiones. En Susarón te recomendamos Laxana, que refuerza el equilibrio de un tránsito intestinal lento y facilita la eliminación.
  • Potenciar los vegetales. Incluir diariamente en la dieta hortalizas, frutas y verduras, legumbres y cereales ricos en fibra.
  • No colar los zumos de frutas. La pulpa es donde está la fibra. Por lo tanto, no hay que colar ni los zumos ni purés y cremas de verduras y legumbres.
  • Consumir la fruta sin pelar. Es preferible lavar la fruta y consumirla con piel.
  • Reducir el consumo de carnes. Platos procesados y embutidos, por su cantidad de sal y conservantes, a un máximo de tres veces por semana.
  • Evitar los alimentos refinados. Empanadillas, chocolate, compotas, tartas, dulces y pasteles; suprimir estos últimos si hay sobrepeso.
  • Comer y beber despacio. Hablar mucho o comer rápido provoca que entre mucho aire a nuestro cuerpo. Esto desencadenará a un dolor abdominal, hinchazón, eructos y flatulencias.
  • Aumentar el consumo de alimentos fermentados. Los alimentos digestivos mejoran el bienestar digestivo y el hábito intestinal. Son alimentos que aportan microorganismos beneficiosos para el intestino. El yogur, el queso, el pan, el chucrut, el kéfir, el kimchi o el vinagre son alimentos fermentados
  • Realizar actividad física moderada diariamente. caminar, montar en bicicleta, nadar, etc. Los ejercicios tipo Pilates son muy beneficiosos y más recomendables que deportes de alta intensidad que pueden poner nuestro cuerpo al límite.

Cuidar la alimentación es la base para la mejora de las molestias intestinales. Estos consejos prácticos son ideales para tenerlos en cuenta en situaciones ocasionales de malestar digestivo. Pueden interesarte las infusiones Vientre Sano, con efecto prebiótico, que promueve una flora intestinal saludable, y la infusión Elimina gases, a base de alcaravea e hinojo. ¿Ya las has probado?