HIDRATACIÓN SUSARÓN 1

Hago deporte, ¿qué pasa con mi hidratación?

Uno de los pilares básicos de la salud es la práctica de actividad física de manera regular. También, en estos pilares de los hábitos saludables encontramos el descanso, la hidratación y por supuesto, la alimentación.

Al practicar ejercicio se genera calor, y, en consecuencia existe una pérdida de líquido interno, por ello es importante reponerlo. Pero, aunque no lo creas, la forma en que te hidratas puede afectar a tu rendimiento.  Para entender mejor cómo hacerlo, sigue leyendo ¿Por qué es crucial? ¿Qué función tiene la hidratación en los deportistas?

La hidratación es para todos

Hidratarse es un acto necesario para todas las personas. En general, alrededor de un 60% de nuestro cuerpo está compuesto por agua. Estar hidratados es necesario porque el agua tiene funciones fundamentales en nuestro organismo:

  • Forma parte de la composición de las células. Sin agua, las células no pueden hacer intercambio de nutrientes, y, por lo tanto, se desnutren.
  • El agua permite transportar nutrientes como minerales, proteínas o vitaminas por el organismo.
  • Mantiene estable el volumen sanguíneo.
  • Actúa como lubricante en las articulaciones y tejidos.
  • Ayuda a eliminar toxinas y residuos, a través de la orina.
  • Permite controlar la temperatura corporal.

 

La ingesta de agua aconsejada está alrededor de 1,5 a 2 litros al día, que también dependerá de la temperatura exterior, del tipo de alimentación que lleve la persona y del estado fisiológico de cada uno. No obstante, una persona cuya alimentación es abundante en verduras y frutas, no necesitará beber la misma cantidad que otra que coma estos alimentos en menor proporción.

No todo vale…

Cuando hablamos de hidratación no vale emplear cualquier líquido. Según la SENC (Sociedad Española de Nutrición Comunitaria) y su pirámide de hidratación saludable, los líquidos que más deben abundar en nuestra hidratación diaria son aguas minerales o del grifo, bebidas refrescantes sin azúcar o acalóricas, té, café o infusiones sin azúcar.

Sin embargo, otras bebidas como los zumos de frutas naturales, de verduras, caldos, zumos comerciales, leches, cervezas o bebidas con azúcar, así como bebidas refrescantes, son bebidas que deben ser consideradas como de consumo ocasional. Estas últimas deben ser consumidas semanalmente o quincenalmente, dando prioridad a las de consumo diario.

El motivo es que las bebidas que se pueden beber diariamente según esta pirámide no deben contener azúcares ni calorías que puedan afectar, sobre todo, en el peso, y también en la salud. Una hidratación saludable puede realizarse a través de agua, infusiones, y por supuesto a través de la alimentación.

Hidratación y deporte

Además de la alimentación y la temperatura ambiental hay otro factor que condiciona la cantidad de agua que hay que beber: la actividad física que se realiza. Y, es que entrenar genera calor muscular y eso hace que aumente la temperatura corporal. Precisamente, una de las funciones del agua es regular la temperatura corporal.

Pero, además, la deshidratación en personas deportistas puede llegar a provocar lesiones. Igualmente, si no bebemos la cantidad adecuada nuestro rendimiento deportivo no tendrá los efectos deseados ¿Por qué? La deshidratación produce una disminución en la lubricación de las articulaciones. Así mismo, aumenta la sensación de fatiga que repercutirá de forma generalizada en nuestros entrenamientos o competiciones.

Como hidratarse si hacemos deporte

Para evitar la deshidratación al realizar deporte hay que tener en cuenta:

 

  • No hay que esperar a tener sed, hay que ir bebiendo a lo largo de todo el día. Aunque no tengamos sensación de sed debemos reponer nuestros líquidos. Si quieres algunos consejos te ayudamos en nuestro blog.
  • Hay que aumentar la cantidad de agua que se bebe antes de practicar deporte. Sería necesario realizar este aumento 1 o 2 horas antes del entrenamiento para llegar con un nivel óptimo de hidratación.
  • No beber grandes cantidades de golpe: hay que beber pequeños tragos de manera frecuente, cada 15 a 20 minutos, para ir manteniéndonos hidratados sin tener sensación de barriga llena.
  • Es recomendable que el agua esté a temperatura ambiente. Así evitaremos que el cambio de temperatura brusco provoque molestias tanto en la garganta como estomacales.

Y al acabar de practicar deporte… ¡Seguimos con la hidratación!

Después de hacer deporte, debemos seguir bebiendo agua. Lo ideal sería pesarse antes de realizar deporte, y pesarse después. La diferencia de peso nos indicará la cantidad de líquido que se ha perdido durante la actividad física. Esta cantidad es la que deberemos reponer, por ejemplo, si hemos perdido medio litro repondremos ese líquido durante las siguientes horas.

Recuerda que para lograr rehidratarte puedes hacerlo con agua o también a través de infusiones. Por ejemplo, Brasil de Susarón, no solo te va a ayudar a recuperar líquido, también tiene un efecto estimulante y de reducción de fatiga mental, gracias a su café verde y guaraná. Además de tener un delicioso sabor te permitirá ¡rehidratarte y recuperar energía en cada sorbo!

¡Deportista! Incrementa la cantidad de tu líquido ingerido. Mantén tu cuerpo en buen estado gracias a ingerir agua adecuadamente, y no te olvides de hidratarte también gracias a tu alimentación. Tu organismo lo notará y también tu rendimiento ¡A por tu hidratación!