Propiedades frutas refrescantes de verano

5 frutas refrescantes de verano y sus propiedades

¿Has notado la subida de temperatura? ¡Pues sí! Efectivamente el verano acaba de empezar. Ha llegado la hora del cambio de armario y empezar a utilizar prendas más fresquitas, de visitar la playa y dar largos paseos por la orilla, de organizar excursiones por la montaña, o, simplemente, de quedar con los amigos y pasar un día inolvidable al aire libre. Además, es el momento de adaptar la alimentación diaria para combatir el calor y la retención de líquidos.  A continuación, te presentamos 5 frutas de verano de lo más refrescantes. ¿Quieres conocer sus propiedades?

Sandía

Es la fruta del verano por excelencia, con casi un 92% de agua. Entre su composición nutricional, se encuentran algunas sales minerales como el magnesio y el potasio, aunque la sandía destaca por su contenido en licopeno, una sustancia que actúa como antioxidante ayudando a mantener nuestro cuerpo protegido.

Melón

Es casi tan refrescante como la sandía, pero con ciertas diferencias, ya que aporta más cantidad de carbohidratos. Un aspecto desconocido en el melón y más asociado a la naranja, es la dosis elevada de vitamina C y de betacarotenos, dos antioxidantes capaces de mantener el buen funcionamiento de nuestro sistema inmunológico. Con 10mg por cada 100g de melón, se trata de una de las frutas más ricas en sodio, con respecto a los 4g aproximadamente que contienen el resto.

Melocotón

Con casi el 90% de agua, el melocotón forma parte de las frutas más refrescantes para el verano. Como su nombre parece indicar, la variedad con más cantidad de agua es la fresquilla, también llamada melocotón de agua. Su principal beneficio es su riqueza en betacarotenos, especialmente en los melocotones de coloración amarilla. Los betacarotenos son precursores de la vitamina A, relacionada con el buen estado de la piel. ¿Qué mejor manera de cuidarse?

Ciruelas

Las ciruelas también forman parte de la temporada de verano y se nota el frescor que desprenden al morderlas. Aunque son frutas ricas en vitaminas, las ciruelas destacan por su gran aporte de fibra soluble, por lo que también pueden producir un efecto laxante. Pueden consumirse desecadas o en mermelada, pero si lo que quiere uno es hidratarse, la mejor manera es comerlas frescas. Una ración de ciruelas suele corresponder a 3-4 unidades pequeñas o 2 grandes.

Frambuesas

Por último, ponemos de relieve las frambuesas. Aún estando más asociadas a la  pastelería o la ornamentación de algunos platos, estas frutas del color de la pasión despuntan por su elevada proporción de agua, así como por su fibra soluble, y constituyen una buena fuente de vitamina C. Además, como todos los frutos rojos, son ricas en antioxidantes.

Así que ya sabes, ¡este verano olvídate del calor con las frutas más refrescantes! Como postre, desayuno, merienda o tentempié, disfruta de su sabor mientras te cuidas.