Deporte e infusiones, ¿cómo hidratarte correctamente? - Susarón

Deporte e infusiones, ¿cómo hidratarte correctamente?

La importancia del agua en nuestro cuerpo es vital. Se entiende entonces la unión de deporte e infusiones como la combinación perfecta para una recuperación correcta tras una buena sesión de cardio.

El cuerpo humano está compuesto en un 60-70% de agua, aunque esta proporción oscila a lo largo de la vida. En términos generales, va descendiendo a medida nos hacemos mayores, en momentos concretos como al hacer ejercicio estas reservas bajan drásticamente por eso la hidratación con agua e infusiones es fundamental.

 

El agua es un elemento imprescindible para la vida. Entre otras funciones, se encarga de transportar nutrientes a las células, regular la temperatura corporal y la presión arterial, o facilitar la digestión. Por lo que necesitamos estar bien hidratados para que el organismo pueda funcionar de manera óptima.

Cuando hablamos de deporte e infusiones hablamos de como la alimentación y el entrenamiento no son los únicos factores a tener en cuenta. Una correcta hidratación es también clave en el rendimiento deportivo. Una deficiente ingesta de agua puede afectar a la capacidad de contracción y relajación muscular, a los mecanismos de regulación de la temperatura corporal o a la capacidad de concentración del deportista, desencadenado una bajada del rendimiento y un mayor riesgo de lesión. La unión entre deporte e infusiones puede ser la clave para quienes en un momento dado están saturados de agua.

Deshidratación durante el ejercicio físico

Cuando realizamos ejercicio físico, existe una pérdida de agua corporal a través de la piel. El sudor tiene como función principal regular la temperatura de nuestro organismo. Dicho de otra forma, se encarga de refrigerarnos, especialmente en ambientes calurosos y con una humedad alta.

No obstante, no todos los deportistas se deshidratan de igual forma. La capacidad física, la composición corporal, el tipo e intensidad de deporte o la aclimatación al ambiente, pueden influir en el estado de hidratación de la persona. Por ello no es descabellado mezclar deporte e infusiones como uno de los métodos más sanos de recuperar agua en nuestro cuerpo.

La hidratación en el deporte, además de refrigerar el cuerpo, participa activamente en otros procesos importantes:

  • Disminuye el riesgo de lesiones. Los líquidos actúan como un lubricante natural para las articulaciones, a la vez que facilitan el aporte de nutrientes. Una correcta hidratación previene la aparición de calambres y fatiga muscular, reduciendo así el riesgo de lesiones.
  • Favorece la eliminación de sustancias de deshecho. Durante la práctica deportiva se activan procesos metabólicos que generan sustancias no necesarias para el organismo. El agua colabora con el sistema excretor para deshacerse de todas estas impurezas.
  • Optimiza y mejora la producción de energía. El glucógeno es la principal fuente de combustible durante el entrenamiento. Podemos aportarlo mediante alimentos ricos en hidrato de carbono durante la práctica deportiva, aunque nuestro cuerpo tiene la capacidad de almacenarlos principalmente en el hígado y músculos. Sin embargo, para que esto suceda, necesitamos estar bien hidratados.

Recomendaciones antes, durante y después del ejercicio

Mantener un correcto estado de hidratación es imprescindible para el rendimiento, especialmente en eventos de larga duración o en ambientes calurosos. Cuando las tasas de sudoración son altas, y el consumo de líquido no es suficiente para cubrir las pérdidas, se produce una pérdida de agua corporal. Una pérdida por transpiración igual o superior al 2% del peso corporal puede conllevar un riesgo para la salud y el rendimiento del deportista. De ahí la importancia de una correcta hidratación no solo durante el ejercicio, sino también antes y después de la práctica.

En algunos casos, el color de la orina puede ser una buena referencia para saber si la cantidad de agua que estamos tomando es suficiente. Un color amarillento intenso es indicativo de deshidratación, por lo que deberíamos aumentar la ingesta de bebida para prevenir una bajada del rendimiento y otras complicaciones.

Por el contrario, la sensación de sed no suele ser un indicador fiable, ya que dicho mecanismo se activa cuando ya existe un estado de deshidratación considerable.

La combinación entre deporte e infusiones es clave incluso antes de comenzar el ejercicio

Hidratación previa

En términos generales, se recomienda una ingesta de 400-600 ml de líquido durante las horas previas al inicio de la actividad. No obstante, sería ideal dejar de beber a partir de los últimos 90-120’ previos; con ello conseguimos empezar bien hidratados, pero con la vejiga ya vacía.

Según las necesidades y objetivos de cada deportista, puede cubrirse las recomendaciones con agua, bebidas ricas en hidratos de carbono, como las isotónicas, o bien con opciones que aporten un plus de energía. En el apartado deporte e infusiones que nos atañe, una recomendación es la infusión Vigorizante, por ejemplo, contiene Guaraná y café verde, dos ingredientes con efectos interesantes. El guaraná aayuda a optimizar las funciones mentales y físicas para un mejor rendimiento. Por otro lado, el café verde tiene un efecto estimulante mental y físico.

 

Hidratación durante el ejercicio

Teniendo en cuenta que la sed no es un indicador fiable de nuestro estado de hidratación, se recomienda al deportista beber desde el inicio de la actividad, especialmente en distancias largas, aunque no se tenga sensación de sed.

La cantidad de bebida puede variar según las características fisiológicas del deportista, así como las condiciones ambientales y el tipo de ejercicio. En términos generales, se recomienda beber entre 100 y 150 ml cada 15-20 minutos. Durante los meses de calor, y en personas que tiendan a perder más peso durante la práctica, estas necesidades pueden ser ligeramente superiores.

Hidratación después del ejercicio

La reposición de líquidos después de la práctica deportiva es fundamental para una buena recuperación. Pesarnos antes y después del ejercicio, puede ser útil para tener una estimación de cuánto hemos perdido a través del sudor y de la orina.

En cualquier caso, aunque no dispongamos de este dato, la rehidratación debe iniciarse lo antes posible y mantenerse a lo largo de las primeras horas tras haber finalizado la actividad. La cantidad necesaria puede variar también según las condiciones climáticas y las características del deportista y del entreno. Recuerda que el binomio deporte e infusiones no solo te aportará agua sino todos los nutrientes de muchas hierbas medicinales.

La hidratación es una parte fundamental del entrenamiento. Un consumo insuficiente de líquidos puede poner en riesgo no solo el rendimiento sino también la salud. En estos meses de calor, ¡no olvides llevarte un bidón con tu bebida preferida cuando salgas a practicar deporte!

Une sin miedo deporte e infusiones y descubre una nueva forma de hidratación más completa y sana.

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